Dentro de la cueva

octubre 22, 2012 3:35 am . .

En estos tiempos de reforma tributaria recordamos lo expresado por un militar británico acerca de los peligros de las cuevas. Rugía en ese entonces la Segunda Guerra Mundial y los ingleses, con el apoyo de contingentes de la India, Australia y otros países, estaban en plena campaña contra las fuerzas japonesas en el sureste de Asia, en lugares donde abundaban las cavernas.

Decía ese oficial que si durante un enfrentamiento un grupo de soldados se refugia en una cueva, correrán un grave riesgo en caso de que una bala enemiga penetre por la apertura, pues es casi seguro que termine impactando a uno de los soldados. Esto así ya que aún si comienza chocando contra una de las paredes, continuará rebotando hasta alojarse en el cuerpo de alguno de los ocupantes.

Ese militar pudo haber dicho lo mismo de los impuestos. Rebotan y terminan incidiendo sobre alguien, no necesariamente el mismo que aparentemente lo paga al gobierno. Los economistas conocen este proceso de traslación de la carga impositiva, lo han estudiado desde hace mucho tiempo y escrito incontables artículos y libros sobre él.

En términos muy sucintos, quienes al final cargan con el peso de los impuestos son aquellos que no pueden trasladarlos a otros, lo que hace a los consumidores particularmente vulnerables, porque no tienen medios de escapar del gravamen. Por eso los impuestos a las ventas son más peligrosos que los aplicados sobre ganancias, pues son transferibles al precio de los productos. Aún impuestos aparentemente intransferibles pueden ser traspasables, como el que grava las viviendas y puede provocar un aumento en los alquileres.

En lo que toca a la reforma tributaria, si quisiéramos saber el pronóstico de ser alcanzados por los disparos impositivos tendríamos que conocer el factor y dirección de transferencia de los gravámenes propuestos, y luego agruparlos de acuerdo a su incidencia por sectores.

POR GUSTAVO VOLMAR

Publicado en diariolibre.com

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