Un adecuado reordenamiento territorial busca aprovechar y cohesionar puntos fuertes de la geografía para que puedan contribuir al desarrollo

La falta de un adecuado ordenamiento territorial ha hecho de República Dominicana un país con mucha disgregación, en el cual terrenos con vocación agrícola se usan para asentamientos humanos e instalaciones industriales, lo que crea serios problemas económicos y socio-culturales que se convierten en retranca para el desarrollo.

El hecho de que regiones y centros productivos del país tengan dificultades para intercomunicarse por la vía terrestre, plantea un desorden que pone en cuestionamiento el sentido de integridad, ya que los habitantes de una región no se identifican con los de la otra.

Al respecto, el ingeniero Deligne Ascención señala que “ordenar el territorio es el primer paso para hacer crecer y prosperar una nación, por lo que un adecuado ordenamiento de su suelo busca aprovechar y cohesionar los puntos fuertes de la geografía para que puedan contribuir mejor al desarrollo, tanto sostenible como equilibrado, del país en sentido general y de sus regiones en lo particular”.

Para este experto, el suelo físico es el principal recurso de un país, y su ordenamiento, planificación, racionalización y cohesión constituyen una de las tareas fundamentales del Estado, a fin de garantizar un desarrollo sostenible mediante una equitativa inversión de recursos, lo que debe hacerse en alianza entre los sectores público y privado.

Al respecto, el ingeniero Johnny Jones, secretario general de la Liga Municipal Dominicana, observa que la falta histórica de un ordenamiento territorial ha dado lugar a que el país muestre grandes diferencias al interior de las regiones, provincias y municipios, tanto en materia de población como de calidad de vida, ingresos y acceso a servicios.

Suburbanización

Fruto de la anarquía que se observa en el ordenamiento territorial, ha surgido una enorme concentración de pobreza y desempleo en los barrios urbanos, así como la creciente congestión constituyen problemáticas nacionales sumamente complejas, cuya solución exige integrar transporte, vivienda y sistemas de formación y empleo adaptados a las necesidades locales.

Ascención entiende que la gran mayoría de los barrios del país no han sido fruto de una adecuada planificación, sino de un desorden anárquico que ha dado lugar a grandes cordones de miseria.

A su juicio, un adecuado reordenamiento territorial implica la elaboración de un mapa de zonas vulnerables sobre el cual se tome la decisión de reubicar a los grandes asentamientos humanos que las habitan en lugares de mejores condiciones.

Precisa que un ejemplo muy gráfico de la anarquía en el ordenamiento territorial son los asentamientos humanos a lo largo de la ribera del río Ozama, en la cual viven decenas de miles de personas en condiciones infrahumanas, y el cual debió ser uno de los ejes fundamentales para la planificación del desarrollo del Distrito Nacional y la ciudad de Santo Domingo, o el caso de Haina, donde una gran masa humana convive con los riesgos propios de las zonas industriales.

En ese mismo orden, el ingeniero Johnny Jones dice que uno de los graves problemas del municipalismo son los asentamientos humanos en zonas inadecuadas, ya que se dificulta grandemente la prestación de los servicios básicos requeridos, como son agua, electricidad y la disposición de residuos sólidos.

Regionalización y cohesión

Para urbanistas y planificadores uno de los grandes retos que tiene el país para garantizar cualesquiera planes de desarrollo es abocarse a reordenar el territorio nacional.

Este paso implicaría un tipo de organización y cohesión tal en la que la gente se identifique con el territorio donde vive y que sienta la interdependencia con otros lugares, como lo afirma Ángel María Báez Pilarte, del Cruce de Maguana: “Los cibaeños deberíamos ir sin dificultad al Sur y aprender a conocernos, porque aunque somos de un mismo país casi no nos conocemos uno y otro”.

Señalamientos

Johnny Jones
Sec. gral Liga municipal dominicana
Sostiene que el desarrollo territorial desi- gual es resultado de procesos históricos que han dado lugar a concentración  del ingreso y la riqueza, en estrecha relación con la ubicación geográfica y los recursos naturales.

Ángel María Báez Pilarte
Comerciante de Santiago Rodríguez
Entiende que si se logra la comunicación terrestre del Norte con el Sur los habitantes de Santiago Rodríguez y el Cibao aprenderán a conocer mejor a los de San Juan de la Maguana y el Sur profundo.

Deligne Ascención
Ingeniero, experto vial
Defiende la idea de una alianza entre los sectores público y privado para la construcción de obras de infraestructuras de comunicación vial, a fin de dinamizar la economía e impulsar el desarrollo nacional.

725
Rios En las riberas de los ríos Ozama e Isabela se han levantado alrededor de 700 barrios marginados.

16,000
Haina Su gente respira 16,000 toneladas de contaminantes al día. Es una de las 10 ciudades más contaminadas del mundo.

POR RAFAEL ALONSO RIJO

Publicado en elcaribe.com.do