Reclamos laborales
junio 17, 2013 7:34 am . Noticias.
La producción de textiles y otras manufacturas intensivas en mano de obra se ha transformado. No ha sido una transformación en las técnicas de producción, sino en la ubicación de las factorías y en el comercio de los productos.
Hasta hace unos años la confección de ropa en países como los EE.UU., por ejemplo, empleaba a un gran número de personas. Las diferencias de salarios, sin embargo, hicieron demasiado atractivo para las empresas del sector ir trasladando la producción a otros lugares. Comenzaron mudando algunas etapas del proceso productivo y fueron dejando en los EE.UU. una porción menor.
Los sindicatos estadounidenses respondieron inicialmente de forma vigorosa. Montaron campañas publicitarias, alegaron mala calidad de las importaciones, realizaron huelgas y denunciaron las malas condiciones de trabajo en los países a donde se habían movido las industrias. Ya hoy en día se han resignado a la nueva realidad.
Pero ahora hay otro proceso de cambio. A medida que los países receptores de esas industrias mejoran su nivel de vida, aumentan los reclamos por mejores condiciones de trabajo. Es un proceso que está sucediendo sobre todo en Asia, donde la disciplina y formación de la fuerza laboral genera una alta productividad para las empresas y donde ha ido subiendo el porcentaje de obreros afiliados a sindicatos, contrario a otros países, incluyendo la RD.
La semana pasada se reportaron huelgas violentas contra la Nike en Camboya, donde los textiles son el 75% del total de las exportaciones del país. Nike respondió despidiendo a casi 300 trabajadores, pero el número de huelgas entre los 300,000 empleados del sector textil se multiplicó por cuatro en 12 meses, llegando a 134 el año pasado. Vietnam, China, Bangladesh y Tailandia también han sido escenario de protestas.