Sin respaldo de seguros
octubre 30, 2012 4:44 am . Noticias.
A pesar de los daños que el exceso de gastos públicos ha provocado en la economía del país, la República Dominicana ha tenido suerte. Lleva mucho tiempo sin ser afectada por un terremoto de consideración y en los últimos años ha escapado de impactos directos de huracanes. Pero esa suerte tiene un fin y no estamos preparados para enfrentar lo que ocurra cuando termine.
No hablamos aquí del COE, las alertas de colores o las movilizaciones de personas. Nos referimos a los recursos necesarios para reparar los daños. Necesitaremos fondos para reconstruir viviendas, escuelas, oficinas, hospitales, puentes, carreteras y puertos, para adquirir vehículos, maquinarias y equipos, reponer inventarios, reactivar empresas y procesos productivos, y rehabilitar plantas y redes eléctricas. ¿De dónde sacaremos esos fondos?
Pudiéramos pensar que de fuera vendrán a socorrernos. Que la ayuda externa nos dará todo lo que necesitamos. Pero basta ver lo ocurrido en Haití para que nos desengañemos. Puerto Príncipe sigue en ruinas, el aparato productivo continúa colapsado y encima de eso tienen ahora el cólera.
La solución está en tener pólizas de seguros con respaldo de reaseguradores internacionales, y no las tenemos. Las empresas están mejor cubiertas, pero las propiedades públicas y las familias están desprotegidas. Se podría pensar que el gobierno podría «autoasegurarse», lo que significa crear reservas por su propia cuenta. Pero aparte de que no tiene la disciplina fiscal para hacer eso, el autoseguro no es aconsejable en nuestro caso, pues a diferencia de países de gran tamaño un desastre natural aquí puede abarcar fácilmente todo el territorio nacional.
Como para tener seguros hay que pagar las primas que cobran las aseguradoras, parece ilógico hablar de eso cuando estamos agobiados por el déficit fiscal y la forma de resolverlo. Los desastres naturales, sin embargo, no toman en cuenta esos asuntos.
POR GUSTAVO VOLMAR